El presidente Luis Abinader reafirmó este jueves su compromiso con la libertad de prensa como eje central de la democracia, durante su participación en la 81.ª Asamblea General de la Sociedad Interamericana de Prensa (SIP), celebrada en Punta Cana. En un discurso contundente, el mandatario dominicano declaró que «un gobierno que teme a la prensa, teme a la verdad», y que su administración está firme en la protección del derecho a informar y a ser informado, garantizando un entorno de respeto, seguridad y ética profesional para los comunicadores. «Sin prensa libre, no hay transparencia; sin transparencia, no hay confianza; y sin confianza, la democracia se desvanece», afirmó Abinader, en un mensaje directo a los líderes de la región, donde la libertad de expresión enfrenta crecientes amenazas.
Abinader subrayó que una sociedad democrática y madura no solo no teme al debate, sino que lo fomenta, y que la crítica constructiva debe ser vista como una oportunidad de mejora. «Una sociedad que silencia las diferencias o censura la crítica está condenada al estancamiento», advirtió el presidente, quien recalcó que la defensa de la verdad es un acto de patriotismo cívico y una obligación moral de todos los actores sociales. En un contexto donde la desinformación y el caos informativo amenazan con socavar la credibilidad de las instituciones, Abinader destacó el papel del periodismo libre y riguroso como antídoto contra las fake news y los discursos que buscan manipular a la opinión pública.
El mandatario también hizo un llamado a los periodistas y medios de comunicación a mantener su independencia y a ejercer su labor con responsabilidad, recordando que la libertad de prensa no es un privilegio, sino un derecho fundamental que debe ser protegido y ejercido con ética. «Mientras en este país se escuche una voz libre, se publique una verdad valiente y se respete una opinión distinta, podremos decir con orgullo que la libertad vive entre nosotros», afirmó Abinader, en un mensaje de esperanza para una región donde países como Cuba, Nicaragua y El Salvador enfrentan graves retrocesos en materia de libertades. El presidente reconoció que la libertad de prensa es un camino que se construye día a día, con confianza y respeto mutuo entre el Estado, los medios y la sociedad.
Durante el evento, el presidente de la SIP, José Roberto Dutriz, alertó sobre los desafíos que enfrenta el periodismo en la región, donde el discurso de estigmatización contra los medios ha obligado a muchos comunicadores a trabajar en el exilio. Dutriz destacó casos como los de Cuba, Nicaragua y El Salvador, donde la libertad de prensa ha sido sistemáticamente erosionada por gobiernos que persiguen, censuran y criminalizan a los periodistas. Sin embargo, también expresó optimismo al afirmar que el periodismo tiene futuro si logra reinventarse y defender la integridad de la información como pilar de la democracia. «Sin periodismo independiente, no hay democracia», enfatizó Dutriz, quien instó a los gobiernos a garantizar condiciones seguras para que los comunicadores puedan ejercer su labor sin temor a represalias.
La 81.ª Asamblea General de la SIP, que reúne a editores, periodistas y ejecutivos de medios de todo el continente, tiene como eje central el análisis de los desafíos del periodismo contemporáneo, incluyendo la sostenibilidad de los medios, el impacto de la inteligencia artificial y la defensa de la libertad de expresión en la era digital. Durante el acto, Abinader y Dutriz firmaron la Declaración de Salta II, un documento que actualiza los principios de libertad de expresión en el contexto de los cambios tecnológicos y los nuevos desafíos digitales. Esta declaración, originalmente instituida en 2018, fue revisada y aprobada en la 80.ª Asamblea General celebrada en Córdoba, Argentina, en 2024, y busca adaptar los estándares de libertad de prensa a un mundo donde la desinformación y las redes sociales han transformado el ecosistema informativo.