Proteger la salud cardiovascular es esencial para prevenir enfermedades que son una de las principales causas de mortalidad en el mundo. Aunque los suplementos nutricionales son populares, el doctor Domingo Carrera, médico nutricionista, destaca que solo tres micronutrientes tienen eficacia probada: Omega 3, ácido fólico y coenzima Q-10.
Los Omega 3 son efectivos para reducir el colesterol, los triglicéridos y la presión arterial, mientras que el ácido fólico ayuda a disminuir la homocisteína, mejorando la circulación. La coenzima Q-10 está asociada con una menor mortalidad cardiovascular. Sin embargo, la Mayo Clinic advierte que no hay pruebas concluyentes de que estos suplementos prevengan infartos o enfermedades cardíacas por sí solos.
Los expertos coinciden en que la mejor estrategia para proteger el corazón es adoptar hábitos saludables:
- Dieta equilibrada: Frutas, verduras, frutos secos, pescado y cereales integrales.
- Evitar: Tabaco, exceso de sal, azúcares y grasas saturadas.
- Ejercicio regular: Mantener un peso saludable y realizar actividad física.
Los suplementos pueden ser un complemento útil, pero nunca sustituyen una alimentación equilibrada ni un estilo de vida activo.
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